El Presidente Bartlet (Martin Sheen), decide viajar hasta Oklahoma, para conocer “in situ” las consecuencias del paso de un tornado. El aspecto desolador del lugar hace que se quede más tiempo de lo que él y su equipo tenían pensado inicialmente.

Mientras tanto, en la Casa Blanca, Leo (John Spencers) se impacienta por la tardanza del Presidente debido a la cantidad de problemas que reclaman su presencia en Washington.Además, la perdida del voto de un senador demócrata, hace que Donna (Jannel Moloney) esté preocupada porque teme convertirse en el chivo expiatorio.

El ex presidente Lassiter ha fallecido, por lo que se preparan los funerales de Estado para despedirlo con la presencia de altos dignatarios, entre ellos el actual presidente, Bartlet.

Bartlet vuela en el Air Force One para acudir a los funerales de Lassiter, junto a él viajan dos ex Presidentes. Durante el trayecto, el actual y los anteriores mandatarios cambian impresiones sobre algunas de las decisiones que se han tomado en el pasado y que afectan al mandato actual.

Entre estas decisiones, están las que han provocado que se produzcan disturbios en Arabia Saudí, además del secuestro de 200 personas -algunas de ellas norteamericanas- y de poner peligro la reserva del petróleo mundial.

La conclusión que obtiene Bartlet es que “los dogmas del pasado ya no son válidos en el tormentoso presente”.

Una explosión nuclear en el Oceáno Índico crea alarma, por lo que el Presidente ordena una investigación. El origen es desconocido, aunque las sospechas recaen en Irán o Corea.

La investigación revela que hay un nuevo actor que se ha instalado en el escenario nuclear.

Josh tiene que lidiar con una comisión de la NASA, que quieren saber cuales son los planes del gabinete con respecto al futuro de la exploración espacial. Al frente de la misma se encuentra Alex Moreau – personaje interpretado por la actriz Christina Chang-, que resulta ser más dura de lo que ha previsto el asesor.

Leo intenta por todos los medios que el Vicepresidente Russell (Gary Cole), se mantenga ocupado y no se inmiscuya en los asuntos que está llevando.

Un avión es abatido por Corea del Norte, y sus cinco tripulantes caen en territorio enemigo. El presidente Bartlet ordena que se envie a un grupo de Seal para que rescaten a los militares y evitar más problemas políticos en la zona. Este episodio hace revivir a Leo una situación como la que están pasando los militares, cuando se encontraba en el ejercito durante la guerra de Vietnam y su avión fue abatido teniendo que ser rescato por un oficial. Oficial que en la actualidad está siendo juzgado por recibir sobornos para facilitar contratos con el ejército. Leo debe sopesar si declarar o no en el juicio contra el militar. C.J. acepta participar en un duelo televisado con el Taylor Reid, un opositor del partido conservador.

El personaje que interpreta Martin Sheen tendrá que decidir si iniciar una intervención militar o persistir en la negociación pacífica. Las aguas están revueltas en la Casa Blanca. Justo antes de la emisión por televisión del mensaje en el que Bartlet informa del asesinato de los tres miembros de la delegación de congresistas en un atentado de Gaza, salta la noticia de que Israel esta atacando objetivos palestinos con misiles. La escalada de violencia parece imparable. Un amplio sector de la opinión pública y de colaboradores próximos al presidente, partidarios de una intervención militar, presionan a Bartlet que persiste en su fe en una negociación de paz. Mientras tanto Josh se va a ver a Donna que lucha por su vida en un hospital de Alemania. Allí conoce a su amigo fotógrafo y además debe llevar a cabo una misión inesperada.

Cuando Bartlet y Leo discuten sobre cual es la mejor manera para responder al ataque de Gaza, Kate aparece con la solución.

Las reuniones se suceden en Camp David para intentar encontrar un punto de acuerdo entre palestinos e israelíes.