Antes de morir, el famoso pistolero Pinto Sykes maldice a Conny Miller, un pistolero que llevaba detrás de Pinto cuatro meses. Pinto le reta a un último encuentro junto a su tumba.
Un promotor de poca monta que necesita dinero desesperadamente, sustituye a su robot averiado en una pelea ilegal, donde los humanos no pueden participar.