Después de retirarse fuera del centro de detención, Fushiguro se da cuenta de la muerte del espíritu maldito de grado especial. Sukuna llega y retiene a Yuji como rehén arrancándole el corazón, creyendo que Yuji no sería tan imprudente como para intentar hacerse cargo. Luchan por el dominio, pero incluso con la ayuda de su shikigami, Megumi es dominado.

Mientras se entrenan para el evento de intercambio, Nobara y Megumi se encuentran cara a cara con los estudiantes de la Escuela Técnica de Magia del Área Metropolitana de Kioto con los que competirán en el próximo evento de intercambio, Mai Zenin de segundo año y Aoi Todo de tercer año, quienes los desafían a una pelea.

Aparecen dos nuevas maldiciones y alejan a Yuji y Nobara del campo de batalla, dejando a Megumi enfrentando a una maldición de grado especial. Se encuentra en su límite de poder, antes de recordar las palabras de consejo de Gojo, que lo alienta a desatar su expansión de dominio: Jardín Sombrío de Químeras.

Geto tiene cada vez más dudas sobre lo que hace. ¿No es duro seguir siendo un hechicero? ¿Qué gana protegiendo a los débiles? ¿Qué quiere hacer realmente? Muchas dudas que acabarán con una conclusión que cambiará las cosas para siempre.